La inolvidable noche de Liniers
El partido más emotivo en lo que va del Siglo XXI para Peñarol. Luego de 24 años, teníamos la posibilidad de volver a una final de Copa Libertadores de América, pero teníamos un duro rival en el camino: el Vélez Sarsfield de Gareca, al cual habíamos derrotado 1 a 0 en Montevideo con aquel cabezazo mágico de Darío Rodríguez. La hinchada de Peñarol fue durante toda la Copa la que más entradas vendió, tanto de local como de visitante, y en este viaje a Buenos Aires, no iba a ser la excepción. Cientos de ómnibus, autos, camionetas y varios viajes en barco y aviones transportaron a los manyas hacia lo que sería un partido épico.
La previa del 2 de junio de 2011 nuevamente se vivió en el Obelisco aunque también varios prefirieron ir directo hacia la cancha. Aquel día, Buenos Aires era un caos, y la caravana de bondis carboneros enfilaron lentamente por la avenida rumbo al Amalfitani. Parecía que no se llegaba más al estadio. La cancha estaba separada del estacionamiento de los vehículos por una vía de un tren que estaba en funcionamiento. La gente estaba amontonada como ganado y cada vez que se levantaba la barrera, unos pocos podían pasar. La ansiedad mezclada con el nerviosismo y la inoperancia policial hacía que la hinchada se malhumorara; todo parecía estar en nuestra contra, por eso era más lindo el partido.
La popular visitante estaba repleta, 10.000 personas coparon el estadio Amalfitani siendo esto un record. Ni los cuadros de la propia Argentina abarcan lo que abarcó Peñarol aquella noche.
El partido era más que complicado. El 1 a 0 en la ida no garantizaba nada, y era fundamental poder marcar por lo menos un gol de visitante para respirar con aire durante los 90 minutos. De arranque, Martinuccio tuvo un mano a mano con Barovero pero la definición del “porteño” no fue la mejor y el golero contuvo el disparo. Minutos después, tras un centro por izquierda, Martinuccio tiene un cabezazo que se va apenas por encima del travesaño. Ahí se dio un click en el partido, y Veléz comenzó a tener el balón y llegar a nuestro arco, aunque no con demasiado peligro.
A los 33 minutos llegó lo que todos fuimos a buscar. Olivera baja una pelota de cabeza para Martinuccio, éste toma la pelota y se cruza por afuera del área grande y le mete un gran pase a Matías Mier que entra por izquierda y tras controlar con dificultad el balón la manda a guardar para el 1 a 0 y el delirio de la hinchada. Un minuto después, y a la salida de un corner, Olivera cabecea una pelota y Barovero la manda al corner tras gran atajada.
Sobre el final del primer tiempo, Vélez marca un gol pero el juez anula la jugada por un offside que no fue. Sin embargo, en el cierre de la primera mitad, los argentinos logran un empate a través de una jugada donde sí hubo offside.
En el segundo tiempo la pelota fue de Vélez pero la más clara la tuvimos nosotros, con un remate de Olivera solo frente al arco que terminó yéndose desviado. A los 66, el “Tanque” Santiago Silva marcó el segundo y le daba un tiempo de 25 minutos a Vélez para lograr el gol de la clasificación.
El nerviosismo ya estaba instalado en la tribuna y creció aún más cuando a los 74 minutos Guillermo Rodríguez toca la pelota con la mano y el juez sanciona penal. Quedará en el recuerdo aquella famosa imagen cuando Juan Manuel Olivera pasa por al lado del ejecutante Santiago Silva, y le dice algo al oído. En respuesta, el “Tanque” contesta “la c***** de tu madre Juan”. La historia la conocemos todos, Silva patea el penal, se resbala y la pelota se fue por arriba del travesaño.
Todos nos abrazamos para llorar de felicidad, para recordar a los que no estaban con nosotros físicamente en ese momento, en ese lugar, pero que fueron parte de esos abrazos y ese festejo. Mientras los 10.000 delirábamos en Liniers, en Montevideo y en todo el interior las calles se poblaron de manyas como hace muchos años no pasaba. ¡Peñarol a la final de América!
Ficha del partido
Vélez 2 – Peñarol 1 – 02/06/2011
Cancha: Estadio José Amalfitani (Buenos Aires).
Jueces: Enrique Osses, Francisco Mondría y Patricio Basualto (Terna de Chile).
Vélez Sarsfield: Marcelo Barovero, Fabián Cubero (13′ Fernando Tobio), Sebastián Domínguez, Fernando Ortiz, Emiliano Papa; Augusto Fernández, Héctor Canteros, Víctor Zapata (87′ David Zapata); Maximiliano Moralez (60′ Ricardo Alvarez); Juan Manuel Martínez y Santiago Silva. Director Técnico: Ricardo Gareca. Suplentes: Germán Montoya, Leandro Desábato, Iván Bella, y Guillermo Franco.
Peñarol: Sebastián Sosa, Alejandro González, Carlos Valdez, Guillermo Rodríguez, Darío Rodríguez; Matías Corujo, Nicolás Freitas, Luis Aguiar, Matías Mier (70′ Fabián Estoyanoff); Juan Manuel Olivera y Alejandro Martinuccio (82′ Emiliano Albín). Director Técnico: Diego Aguirre. Suplentes: Fabián Carini, Emilio Mac Eachen, Nicolás Domingo, Antonio Pacheco y Rodrigo Pastorini.
Goles: 34′ Matías Mier (P) y 45′ Fernando Tobio (VS), 67′ Santiago Silva (VS).
Tarjeta roja: 69′ Fernando Ortiz (VS).
Tarjetas amarillas: 44′ Fernando Ortiz (VS), 50′ Santiago Silva (VS), 84′ Emiliano Albín (P).